Las carillas dentales son una de las soluciones dentales cosméticas más efectivas y populares. Gracias a su diseño fino y altamente personalizable, pueden transformar su sonrisa, mejorar la forma, el tamaño y el color de sus dientes y, en algunos casos, incluso alterar su apariencia facial. Sin embargo, para disfrutar de sus beneficios durante muchos años, es importante comprender cómo cuidarlas y qué esperar en cuanto a su longevidad.
Las carillas de porcelana, las más comunes, están diseñadas para ser delgadas y duraderas, pero también pueden ser frágiles si no se protegen adecuadamente. Para mantenerlas en excelentes condiciones, es necesario tener cuidado con ciertos alimentos. Alimentos duros como manzanas crujientes, zanahorias, verduras crudas o carnes con hueso pueden astillar o agrietar las carillas.
Consejos para el cuidado de sus carillas:
Una de las principales ventajas de las carillas dentales es su larga duración. Si bien su costo inicial puede ser mayor que el de los tratamientos de adhesión o blanqueamiento, ofrecen una durabilidad excepcional.
¿Cuánto duran las carillas?
Con el cuidado adecuado, las carillas de porcelana pueden durar aproximadamente entre 15 y 20 años, lo que las convierte en una inversión que vale la pena para su sonrisa. Son resistentes a las manchas y mantienen su aspecto brillante y natural por mucho más tiempo que otros tratamientos cosméticos como la adhesión dental.
¿Por qué elegir carillas?
Aunque las carillas pueden parecer costosas al principio, su durabilidad y beneficios estéticos las convierten en una opción rentable a largo plazo. Pueden mejorar significativamente su sonrisa y aumentar su autoestima, a menudo ayudándole a evitar procedimientos más invasivos o costosos en el futuro.